¿Realmente están comiendo lo que crees?
La diferencia entre formular y alimentar
Diseñar una ración balanceada en papel es solo el primer paso. Sin embargo, lo que llega al comedero y lo que realmente consumen los animales puede ser distinto.
Esa diferencia es la raíz de muchos problemas productivos: pérdida de peso, reducción en la ganancia diaria, deficiencias nutricionales y problemas metabólicos.
Por eso, medir y observar de forma constante es clave para lograr que la nutrición se traduzca en resultados. Además, permite detectar variaciones antes de que se conviertan en un problema mayor.
¿Qué debes revisar en campo?
- Primero, derminar que cantidad de alimento debe comer cada animale de acuerdo a la etapa productiva a la que se encuentre. De esta manera, podrás ajustar con precisión y evitar tanto el desperdicio como la falta de nutrientes.
- Después, observa el comportamiento de consumo. Los animales “hablan” con sus acciones: si comen con ansiedad, dejan alimento o muestran apatía, puede ser señal de un problema en la ración o en la forma de ofrecerla. Además, prestar atención a estos detalles permite detectar cambios a tiempo y corregirlos con rapidez.
- Por otro lado, considera los factores de ajuste. Cada especie, etapa productiva, temperatura ambiental y condición corporal requieren modificaciones específicas. En cambio, aplicar la misma ración en todas las situaciones puede generar desequilibrios y afectar la productividad.
- Finalmente, revisa siempre la calidad de los ingredientes. La humedad, el tamaño de partícula y la variación en la calidad de las materias primas impactan directamente en el consumo y la digestibilidad. Por lo tanto, una materia prima en mal estado puede arruinar toda la ración y comprometer los resultados
Beneficios de medir y ajustar
- Mejor aprovechamiento del alimento.
- Reducción de costos por desperdicio.
- Mayor uniformidad en los lotes.
- Prevención de deficiencias y enfermedades ligadas a la nutrición.
- Incremento en la productividad y en la rentabilidad del sistema.
En resumen, medir y ajustar no es un gasto extra de tiempo, sino una inversión que se refleja en resultados productivos y económicos.
La nutrición no es estática, es dinámica
Alimentar no se trata de entregar la misma fórmula todos los días. Es un proceso que requiere medir, verificar y ajustar constantemente.
Por otro lado, cada cambio en el ambiente, en el estado de los animales o en la calidad de los insumos es una oportunidad para optimizar.
En conclusión, el éxito depende de la constancia y la capacidad de adaptación.