En temporada de calor, las vacas no solo pierden agua: también electrolitos clave como sodio, potasio y cloro

¿Por qué es un problema el estrés por calor?

El estrés térmico no solo quita el apetito al ganado. Además, altera el equilibrio de los fluidos corporales y provoca pérdidas de electrolitos esenciales.
Esta pérdida reduce el consumo de alimento, aumenta el riesgo de abortos y genera desbalances metabólicos que afectan directamente la productividad.

Por eso, cuidar la hidratación y el balance mineral es indispensable en épocas de altas temperaturas.

Beneficios de suplementar con electrolitos

💧 Los electrolitos ayudan a estabilizar el balance ácido-base y mejoran la ingesta. De esta manera, contribuyen al bienestar y la productividad del hato.
Una mezcla adecuada de sodio, potasio, cloro y magnesio favorece la osmolaridad y apoya la termorregulación, reduciendo los efectos del calor en el organismo.

En conclusión, un suplemento bien formulado es una herramienta práctica para prevenir pérdidas productivas y mejorar la eficiencia.

¿Cuándo es más importante el uso de electrolitos?

El aporte extra de electrolitos es fundamental en situaciones de:

• Estrés por calor intenso, donde los animales pierden grandes cantidades de minerales a través del sudor y la respiración.
• Diarrea persistente, que incrementa la deshidratación y acelera los desequilibrios.
• Bajo consumo de alimento o agua, que limita la reposición natural de minerales.

Por lo tanto, la suplementación no es solo preventiva, sino también correctiva en casos de riesgo.

Cómo elegir el suplemento adecuado

No todos los suplementos son iguales. Es importante asegurarse de que la fórmula tenga el equilibrio correcto de minerales y la biodisponibilidad adecuada para que el animal los absorba con eficiencia.
Además, contar con asesoría técnica permite ajustar la dosis y el momento de uso según las condiciones de tu ganado y el clima.